martes, 6 de octubre de 2015

EL BARZÓN NACIONAL DEMANDA UNA CONSULTA AMPLIA EN RELACIÓN EL ACUERDO DE ASOCIACIÓN TRANSPACÍFICO

EXIGIMOS UNA CONSULTA Y UN DEBATE CON TODOS LOS SECTORES INVOLUCRADOS.

SE HACE UN LLAMADO AL SENADO DE LA REPÚBLICA A NO DEJARSE PRESIONAR Y EVITAR LA APROBACIÓN POR VÍA RÁPIDA

EXIGIMOS QUE EL SENADO NO ACTÚE COMO OFICIALÍA DE PARTES Y ANALICE EN DETALLE Y RESPONSABLEMENTE ESE ACUERDO.

EL BARZÓN NACIONAL RECHAZA TAJANTEMENTE, LOS ACUERDOS SECRETOS QUE LLEVÓ A CABO EL GOBIERNO FEDERAL A FAVOR DE TRASNACIONALES.

UN PEQUEÑO GRUPO DE EMPRESARIOS BENEFICIADOS NO REPRESENTAN LOS INTERESES DE LOS MEXICANOS.

NO ACEPTAREMOS ESE ACUERDO QUE PROVOCARÁ LA DESTRUCCIÓN DE LA LOS SECTORES PRODUCTORES DE LECHE, DE CARNE, DE TRIGO, CAFÉ Y ARROZ.

En completa secrecía, el secretario de Economía firmó el Acuerdo de Asociación Transpacífico-TPP, el cual pretende comprometer a los negocios, trabajadores y agricultores mexicanos a una apertura económica desigual con riesgo de impactar negativamente actividades productivas fundamentales de los mexicanos.

El país ya cuenta con un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos. Ya sabe de los riesgos que eso implica y no tiene una gran necesidad de mayor acceso a otros mercados internacionales.

Ha trascendido que en sus reglas de origen, porque le conviene a Estados Unidos y a Japón, el TPP abriría los mercados de los integrantes a productores extranjeros –como China–, que no necesitan seguir las reglas y obligaciones del TPP ni necesitan poner en riesgo su planta productiva.

El TPP pretende comprometer a los negocios, trabajadores y agricultores mexicanos a una apertura económica desigual que sin duda debilitará a las principales industrias mexicanas.

Lo más grave de todo es lo relativo al arbitraje comercial, ya que los mecanismos de solución de controversias entre inversores y Estados proporcionan todas las garantías a las trasnacionales, en contra de los países receptores. Será un esquema privado que obliga a los estados a cumplir con sus resoluciones, incluso si el resultado contradice sus leyes nacionales o si afectan los intereses de sus ciudadanos. A eso se agrega la ampliación del plazo de los derechos de las patentes, lo que somete a los consumidores a la posición monopólica de las trasnacionales que invierten actividades de ciencia y tecnología.

Esas cláusulas ponen en riesgo la riqueza natural y los derechos de los productores agropecuarios de México. Eso es más grave si se toma en cuenta que el gobierno, irresponsablemente paga a trasnacionales, apoyado por Bill Gates, para que se apropien de esa riqueza natural.

Eso es inaceptable para nosotros que enfrentamos el embate de las trasnacionales Monsanto, DuPont-Pioneer, Syngenta, Dow, Bayer y Basf, que gracias a los gobiernos del PRI y del PAN ya controlan parte importante del mercado nacional de semillas y quieren apropiarse de la riqueza genética de la agricultura mexicana.

Además, se supo que los negociadores de Estados Unidos están presionando a los países del TPP para que acepten protecciones que dificultarán el acceso a los medicamentos genéricos, aumentarán las ganancias corporativas, sólo por mantener afuera a los competidores.

Es absurdo que Guajardo suponga que era conveniente pactar con los países de mayor crecimiento, porque ellos lo que van a buscar son mercados y eso es lo que les pretende ofrecer el gobierno de Peña.

NO A LOS ACUERDOS NEGOCIADOS A ESPALDAS DE LOS MEXICANOS

NO A LOS ACUERDOS QUE ATENTAN CONTRA LA SOBERANÍA ALIMENTARIA Y LA RIQUEZA NATURAL DE NUESTRO PAÍS
El Barzón Nacional

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