Escrito
por Jenaro Villamil
Los promotores del proyecto Dragon Mart salieron
hoy a la defensa señalando que no existe “ningún familiar” del ex presidente
Vicente Fox entre los accionistas mexicanos, que el predio de más de 560
hectáreas le pertenece a la esposa de Carlos Castillo Medrano, uno de los
accionistas mexicanos, y que continuarán buscando los permisos necesarios para
continuar su construcción.
En conferencia de prensa realizada en al Ciudad
de México, Juan Carlos López Rodríguez, director general de la empresa
inmobiliaria Dragon Mart Cancún, afirmó que la inversión inicial será de 180
millones de dólares, de los cuales, el 90 por ciento es capital mexicano. “en
lo único que podrían participar los extranjeros será en la exposición de
productos”.
López Rodríguez admitió que no cuentan aún con
los requisitos de ley para su edificación. En días pasados, el alcalde de
Cancún, Juan Carlos Ricalde, consideró que el proyecto no contaba con la
autorización del municipio.
Por su parte, el secretario de Economía,
Ildefonso Guajardo, informó que esta dependencia no ha recibido ninguna
solicitud relacionada con el proyecto Dragon Mart.
“No hay elementos porque no hay ninguna solicitud
formal a la Secretaría de Economía en ninguna área de las cuales está
aparentemente pensado este proyecto, pero en su momento, es muy sencillo, con
la ley en la mano se tomarán las decisiones de cualquier solicitud que llegue a
la secretaría”, afirmó Guajardo, en el marco del Foro México 2013.
Proceso publicó en su edición reciente que
en el proyecto Dragon Mart ha privado la falta de transparencia y la opacidad,
así como la oposición de legisladores federales y cámaras empresariales como la
Concamin, la Canacintra, la Caintra y el Consejo Coordinador Empresarial que
están en contra de la competencia que implicaría la venta de mercancía china a
unos cuantos kilómetros de la principal zona hotelera del Caribe.