Entre los rehenes fallecidos había 8 argelinos, 2 japoneses, 2
británicos y 1 francés.
Reuters
30 rehenes murieron, entre ellos 7
extranjeros, durante una operación de rescate de las fuerzas argelinas
en una planta en el desierto capturada por militantes islamistas, informó una
fuente de seguridad local.
La fuente comentó que entre los rehenes fallecidos habían 8 argelinos, 2
japoneses, 2 británicos y 1 francés. La nacionalidad de las otras personas
muertas no estaba clara.
También murieron al menos 11 militantes durante la
operación militar, entre ellos 2 argelinos -el líder de los secuestradores-, 3
egipcios, 2 tunecinos, 2 libios, 1 maliense y 1 ciudadano francés.
3 rehenes fueron liberados por el
Ejército, señaló una fuente local.
Los reportes de muertes de personas cautivas en
la serie apresurada de eventos generó un coro de expresiones de inquietud por
parte de líderes occidentales.
La crisis comenzó cuando hombres armados que se
hacen llamar "Batallón de Sangre" irrumpieron en una planta de gas.
Dijeron que habían tomado como rehenes a 41 extranjeros y
exigieron que Francia detuviera su intervención militar en Malí contra
insurgentes islamistas vinculados a Al Qaeda.
El secuestro masivo incrementó los temores de que
militantes jihadistas lancen nuevos ataques en Argelia, un vasto país desértico
con grandes reservas de petróleo y gas que apenas se está recuperando de un
conflicto con rebeldes islamistas en 1990, cuando murieron unas 200,000
personas.
Una fuente local indicó que 6 rehenes
extranjeros perdieron la vida junto a 8 de sus secuestradores cuando
el Ejército argelino abrió fuego contra un vehículo que estaba siendo usado por
los hombres armados.
Agregó que 40 argelinos y 3 extranjeros fueron
liberados por las fuerzas armadas mientras continuaba la operación de las
tropas locales. Una fuente de seguridad argelina dijo previamente que 25
rehenes extranjeros habían conseguido escapar.
La agencia de noticias mauritana ANI,
que ha estado en constante contacto con los secuestradores, reportó que 7
rehenes permanecían retenidos, incluyendo 2 ciudadanos estadounidenses,
3 belgas, 1 japonés y 1 británico.
Los reportes eran difíciles de confirmar. La
agencia oficial de noticias APS dijo que cerca de la mitad de los rehenes
habían sido liberados y que cerca de 600 trabajadores argelinos lograron
escapar. La operación de rescate todavía se llevaba a cabo, expuso el gobierno
de Argel.
ANI y la cadena de televisión
qatarí Al Jazeera reportaron que 34 rehenes y 15
captores perdieron la vida cuando fuerzas del gobierno dispararon a
bordo de helicópteros mientras los secuestradores intentaban movilizar a sus
prisioneros en un vehículo.
Las cifras de víctimas fatales eran mayores de
las confirmadas por la fuente local y también contradecían los reportes de que
un gran número de extranjeros escapó con vida de la instalación de gas.
El primer ministro británico, David Cameron,
mencionó que la gente debía prepararse para "malas noticias" sobre
los rehenes.
RELEVANCIA DE MALI
El incidente eleva notablemente la relevancia de
la intervención de Francia contra los rebeldes vinculados a Al Qaeda, donde
cientos de tropas y marines galos están realizando una ofensiva en tierra sobre
los insurgentes, luego de ataques aéreos que comenzaron esta semana.
"Lo que ocurre en Argelia ofrece nueva
evidencia de que mi decisión de intervenir en Mali estuvo justificada",
dijo el presidente francés, Francois Hollande, agregando que
los acontecimientos parecían haber dado un giro dramático del que todavía
estaba esperando detalles.
Previamente, indicó que un número no identificado
de ciudadanos franceses estaban entre los rehenes.
El ministro del Interior argelino, Daho
Ould Kablia, argumentó que los secuestradores eran liderados por
Mokhtar Belmokhtar, un veterano guerrillero islamista que peleó contra las
fuerzas soviéticas en Afganistán en la década de 1980 y que fundó una
agrupación en el desierto del Sahara tras distanciarse de otros líderes locales
de Al Qaeda.
El líder rebelde, apodado "El
inalcanzable" por la inteligencia francesa y "señor
Marlboro" por algunos locales por su negocio ilícito de venta de
cigarrillos, no tiene vínculos conocidos con los insurgentes que capturaron
localidades del norte de Mali el año pasado.
"Hay unos 150 rehenes argelinos.
Les decimos a todos que las negociaciones son una señal de fortaleza y que
pueden evitar la pérdida de vidas", declaró.
Irlanda luego confirmó que el rehén se encontraba
entre las personas liberadas. El número preciso y las nacionalidades de los
rehenes extranjeros no podía ser confirmado, ya que algunos países eran
renuentes a revelar información que podría ser útil para los secuestradores.
Gran Bretaña dijo que uno de sus ciudadanos murió
al inicio de la crisis y que otros británicos estaban retenidos. Los militantes
dijeron que 7 estadounidenses estaban entre sus rehenes, una cifra que las
autoridades en Washington no confirmaron.
Statoil dijo que no tenía información
sobre 9 empleados noruegos que habían sido secuestrados, pero que 3
trabajadores argelinos fueron liberados.