Se estima que en
los últimos cinco años este ilícito se duplicó, y que cada base alcanza precios
de 850 dólares a miles de dólares, denunciaron CSI Leasing y su división
Bulltrade de México.
México.- La venta de bases de datos
personales de clientes de empresas e instituciones financieras, e incluso de
gobierno, se ha convertido en un "mercado negro" en ascenso en todo
el país, de acuerdo con las firmas CSI Leasing y su división Bulltrade de
México.
Se estima que en los últimos cinco años este ilícito se duplicó, y que cada
base alcanza precios de 850 dólares a miles de dólares, denunciaron.
Mariano Ontiveros, director Ejecutivo de Bulltrade, empresa especializada en
destrucción de discos duros y computadoras, dijo que pese a que hay una
legislación al respecto que fija multas de hasta nueve millones de pesos, menos
de 350 empresas en el país cumplen con la destrucción de este tipo de
información.
Uno de los métodos más habituales que utilizan quienes venden esta
información es a través del correo electrónico.
Algunos de esos correos exponen: "Ofrecemos importantes y exclusivas
bases de datos de México, que pensamos pueden llegar a ser de su interés. Estas
bases son únicas en el mercado y están actualizadas al año 2012. Pueden
utilizarse para realizar campañas de publicidad y Marketing, garantizándose
excelentes resultados".
"Cada una de estas bases se vende por separado, pero adquiriendo varias
obtendrá importantes descuentos. Una vez realizado el pago, las descargas al
instante de la web. Si desea más información o realizar una consulta envíe un
mail a bases.especiales@yahoo.co.uk y le será respondido a la brevedad".
En este ejemplo el remitente es Denisse Morales, de la dirección
changeable@hotmail.com, en la que ofrece supuestas bases de clientes de bancos
como HSBC, BBVA Bancomer, Banamex, American Express e incluso organismos
públicos como el padrón del Instituto Federal Electoral (IFE) y el IMSS, entre
otras.
Según la empresa Symantec, una de las formas en que los delincuentes se
hacen de este tipo de información es sustraerla de computadoras que han sido
desechadas de las empresas. En estos equipos pueden venir datos personales,
incluso con teléfono celular y dirección.
Manuel Sanz, director de Ventas de SCI Leasing México, empresa de
arrendamiento puro y especializada en tecnología para protección de
información, describió que las empresas desconocen que borrar datos de un disco
duro es "una labor más compleja de lo que se piensa".
Cuando las empresas desechan las computadoras, desconocen que es
insuficiente borrar de forma manual el disco duro, pues en la actualidad la
tecnología permite recuperar los archivos borrados, y "esa es una de las
formas en que se hacen de esa información, además de obtener información confidencial
de la empresa".
La Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los
Particulares establece que una empresa debe destruir su información
confidencial tras un tiempo determinado.
Además de proteger las bases vigentes, en el artículo 11 de dicha
legislación, se determina que cuando los datos de carácter personal de un
usuario hayan dejado de ser necesarios para la empresa, deberán ser cancelados
y destruidos.
Las sanciones que impone pueden llegar hasta los nueve millones a quienes no
la cumplan, sin embargo, todavía son pocas las empresas que lo hacen, consideró
Mariano Ontiveros, quien calculó que son alrededor de 350 firmas en todo el
país, la mayoría transnacionales, las que siguen prácticas corporativas de sus
países de origen.
La firma CSI Leasing trajo en 2012 una unidad especializada denominada
"Unidad móvil de destrucción de información", que contiene
computadoras y máquinas que borran y trituran discos duros, celulares, o
cintas.
Se usan programas y software de la más alta calidad para garantizar el
borrado de la información confidencial que pueda contener un disco duro.
"Son pocas las empresas que cumplen con la norma; se espera que este
año se incremente el número de firmas, debido a que se está fomentando más
conocimiento de un mercado negro que ha ido en aumento" reiteró Ontiveros.