Ese
recurso del presupuesto aprobado para 2013 será para financiar la creación de
empleos; el Gobierno afirma que la medida no elevaría el déficit ni obligaría
alzas de impuestos.
PARÍS (Reuters) — Francia reasignará 2,000 millones de euros
(unos 2,610 millones de dólares) de su presupuesto de 2013 para ayudar a
financiar la creación de empleos, anunció este domingo el Gobierno.
En momentos en que la tasa de desempleo se encuentra en máximos de 15
años, el presidente Francois Hollande ha prometido cambiar la tendencia este año y espera que sus
planes para crear miles de empleos subsidiados y la "generación de
contratos" alienten a las compañías a tomar trabajadores jóvenes.
En declaraciones a la radio Europa 1, el ministro de Presupuesto, Jerome
Cahuzac, dijo que el Gobierno necesitaría elevar su reserva fiscal de 6,500
millones de euros (habitualmente usada para eventos como desastres naturales u
operaciones militares) como medida de precaución.
"Por solicitud mía, el presidente y el primer ministro decidieron
incrementar esta reserva en 2,000 millones de euros porque pensamos que nuestra
política laboral requerirá más dinero para financiar empleos apoyados por el
Estado y la generación de contratos", indicó.
El ministro indicó que el incremento de fondos no elevaría el déficit ni
llevaría a alzas de impuestos, sino que sería financiado a partir de los
actuales presupuestos.
El Gobierno socialista de Hollande ha tenido dificultades para detener
la pérdida de trabajos en el sector industrial, al tiempo que busca reducir el
gasto público y aumentar los impuestos para recortar la deuda fiscal en medio
de una economía estancada.
Un sondeo de IFOP realizado para el semanario Le Journal du Dimanche
mostró este domingo que tres cuartos de los consultados no creía que Hollande pudiera cumplir con sus promesas sobre el empleo en Francia.
El presidente, que ha decidido realizar al menos una visita al interior
de Francia para explicar sus políticas, intenta recuperar el apoyo de los
votantes, que están cada vez más descontentos sobre la gestión económica del
Gobierno y desilusionados por una serie de errores de comunicación.
Cahuzac, quien reiteró que no habría más alzas de impuestos durante la
presidencia de Hollande, dijo de todas formas que la administración no
renunciaría a su intento de elevar los tributos para los más acaudalados.