Visitó
el Hospital General para dialogar con usuarios y médicos sobre carencias
Xalapa, Ver; a 17 de septiembre del
2015.- El exdiputado federal, Juan Bueno Torio, calificó
como una violación a los derechos humanos la falta de garantía en la dotación
de servicios de salud a los veracruzanos, ya que en los hospitales el servicio
es pésimo, no hay medicamentos, las cirugías mayores deben esperar meses y se
carecen de médicos y enfermeras suficientes.
“Esta
lamentable situación -que juega con el valor más preciado que tiene el ser
humano que es el derecho a una vida saludable- toca en Veracruz límites
inimaginables y las cifras así lo demuestran, ya que 190 millones 223 mil
pesos, que la federación depositó al estado de Veracruz en el 2013, fueron
vaciados de la cuenta y hasta el momento se desconoce el destino”.
Lo anterior lo manifestó durante la visita
realizada en las instalaciones del Hospital General de la ciudad de Veracruz, donde
platicó con familiares, pacientes y médicos, ahí Bueno Torio hizo eco de los
testimonios desgarradores de carencia de medicina, atención médica y el mínimo
de condiciones de salubridad, aunado a las necesidades que enfrentan todos los
días.
Es así como continúa con la integración de la
radiografía socioeconómica del estado, la cual se complementará con la
realización de foros en diversas ciudades, que se realizarán en el transcurso
de los próximos meses.
En el tema de salud, lamentó que datos
arrojados el año pasado por el CONEVAL señalan que de 2010 a 2014 el Indicador
de Carencia Social denominado “carencia por acceso a los servicios de salud”
puso 200 mil veracruzanos más en este rango, sin estimar en la medición “la
mejora en las condiciones de operación de las unidades médicas a través de
proyectos de dignificación, conservación, mantenimiento, equipamiento y obra
nueva, que son los objetivos específicos de los subsidios que otorga el
Gobierno Federal”.
Con esto se confirma la manera ineficiente
con la cual el gobierno de Veracruz ha operado los ingresos públicos para la
salud, “manejando los recursos en la opacidad, sin sujetarse a criterios de
objetividad, equidad y transparencia en función de las necesidades para
garantizar el cumplimiento de los objetivos de los programas del sector salud,
como lo establece en la investigación realizada por la Auditoría Superior de la
Federación”.
