La sonrisa es tan contagiosa como
los bostezos. Rodearte de amigos sonrientes te ayudará a olvidar tus tristezas
más rápido.
La sonrisa como el bostezo, es contagiosa. En 1963 una
"epidemia" de risa entre las niñas en un internado en Tanganica
(actual Tanzania) obligó a cerrarlo. Se dice que este ataque pudo ser
provocado por histeria colectiva en lugar de alegría. Otro factor que delata
lo contagiosa que puede ser la sonrisa y la risa genuina, derivó de un estudio
donde se analizaron los efectos de una “caja de risa” donde al abrirla, un
sonido con carcajadas contagiaba a quien la escuchaba.
La risa es algo casi siempre social, se llega a
producir hasta 30 veces más en compañía que en solitario. Un estudio
publicado esta semana en la Royal Society, ha tomado la idea de la contagiosa
sonrisa un paso más allá al examinar el efecto sobre nuestra propia felicidad.
El estudio descubrió que aquellos que se rodean de
amigos con un estado de ánimo saludable y que ríen constantemente, tienen
más posibilidad de salir adelante de una depresión profunda que los que no.
Los investigadores utilizaron datos del Estudio
Nacional Longitudinal de Salud Adolescente para hacer modelos matemáticos
complejos. Ed Hill, autor del estudio reveló que las redes de amistad modelaron
la propagación de los estados de ánimo de los individuos. Encontraron que los
adolescentes con cinco o más amigos mentalmente sanos tenían la mitad de
probabilidades de desarrollar - y el doble de probabilidades de recuperarse de
- la depresión durante un período de seis a 12 meses.
Existen otras pruebas de que la felicidad se
propaga. Un estudio publicado en el British Medical Journal en el
2008, encontró que la relación entre la felicidad de las personas se extiende
hasta tres grados de separación - a la amigos de amigos de amigos - Los efectos
fueron más fuertes con la proximidad geográfica - un vecino feliz aumenta la
probabilidad de que seas feliz. La gente feliz, dicen los autores, pueden ser
más amables con los demás, compartir su buena fortuna al ser más útiles, o
simplemente exudan una emoción que hace que otras personas se sientan mejor
acerca de la vida.