El presidente boliviano encabeza la jornada nacional
de mascado de la hoja de coca, a manera de celebración por la aceptación de la
ONU
EFE
LA PAZ, 14 de febrero.- El presidente de Bolivia, Evo
Morales celebró hoy, arropado por multitudes y al grito de "¡Viva la
coca y mueran los yanquis¡" el reingreso de su país en la Convención
Antidroga de la
ONU con una salvedad sobre el mascado de la hoja de coca.
Tras un año de ausencia, Bolivia retornará el 10 de
febrero a la Convención antinarcóticos con la aplicación de esa excepción sobre
el mascado de coca en su territorio, pues a nivel internacional la
planta seguirá en la lista de estupefacientes de la ONU.
El mandatario, que sigue siendo líder sindical de los campesinos
cocaleros de la zona de Chapare (centro), se dirigió a decenas de miles de
personas en la ciudad central de Cochabamba, que acogió la mayor de las
concentraciones que se sucedieron hoy en el país, dentro de una jornada
nacional dedicada al mascado de coca o 'acullicu', considerado una tradición
sociocultural en este país.
Al terminar su discurso, el mandatario gritó varias veces
"Kausachum coca, huañuchum yanquis", considerado el 'grito de guerra'
de los cocaleros y que en lengua quechua significa "Viva la coca y mueran
los yanquis".
"Llegó el triunfo para que el mundo reconozca que la
hoja de coca no es veneno, que la hoja de coca no es estupefaciente, que la
hoja de coca es parte de nuestra vida y de nuestra cultura", manifestó
Morales.
Fiesta nacional
En La Paz, miles de personas marcharon también por el centro de
la ciudad, mientras que en Santa Cruz, en el este, los campesinos
protagonizaron una concentración menor en la plaza principal.
Los campesinos, indígenas, productores y comerciantes de coca
escenificaron el masticado o mascado de esta planta, defendieron que en su
estado natural no es ninguna droga y mostraron decenas de productos derivados,
entre ellos infusiones, remedios medicinales, ungüentos, preparados de tipo
energético y harinas.
La ONU anunció la semana pasada que solo 15 países, entre ellos
Estados Unidos, presentaron objeciones a la excepción planteada por Bolivia
sobre el veto al 'acullicu' establecido en la convención antidroga de las
Naciones Unidas de 1961.
Habría sido necesaria la oposición de al menos 61 de los países
miembros de la ONU para frenar la solicitud de Bolivia.
Morales dijo hoy que no solamente se ha legalizado el
«acullicu» o «pijcheo», sino que se ha consolidado el derecho de Bolivia
a cultivar la coca para usos culturales.
El último informe de la ONU estableció que en 2011 había en
Bolivia 27 mil 200 hectáreas de cultivos de mata de coca, un 12 % menos
que las 31 mil de 2010.