Próximos aspirantes a alcaldes tendrán mayor responsabilidad para impulsar
el desarrollo de sus municipios en 4 años
Córdoba, Ver.- El obispo de la Diócesis de
Córdoba, Eduardo Patiño Leal, demandó sensatez y madurez a los actores
políticos con miras al proceso electoral en Veracruz y a evitar las
confrontaciones y agresiones entre sí.
Patiño Leal
lamentó lo ocurrido en la rueda de prensa del senador panista Fernando Yunes y
de la diputada federal Leticia López, pues todos tienen derecho a manifestarse
siempre y cuando sea en una forma respetuosa, nunca con agresiones que pongan
en peligro la salud y en un momento dado la vida o la fama de las personas.
“Me refiero
a que en la próxima contienda local en Veracruz, no haya espacio para la
calumnia o cosas que no favorecen que las personas hagan su voto libremente.
Que cada quien haga sus propuestas y la ciudadanía se identifique con alguno de
ellos”, expresó
El llamado,
enfatizó, es que prevalezca el respeto a las personas y a manifestarse con
libertad, pero dentro de los causes que permite que haya una vida social normal
y no se dañe a nadie, mucho menos a terceros. Esto depende de la madurez de
cada persona.
En caso de
que se incurriera en un ilícito, se pronunció porque la autoridad debe atender
a tiempo y aplicar la ley.
De igual
forma, sostuvo que a unas semanas de iniciar los procesos internos en los
partidos políticos, los actores políticos deben actuar de manera serena y
madura “políticamente hablando”, pues no siempre quedan a quienes siguen.
Ojala,
agregó, de manera civilizada, madura y serena puedan al interno de sus partidos
elegir sus mejores propuestas de candidatos a las 212 presidencias municipales
y 30 diputaciones locales e mayoría relativa, esperándose igual conducta cuando
se acerquen las campañas constitucionales para que la ciudadanía esté muy bien
informada de quiénes son, cuáles son sus plataformas, proyectos que tienen máximo.
Y ahora que
las alcaldías serán de cuatro años, expresó el representante de la Iglesia
Católica, es importante que las personas que se elijan tengan arraigo, sean
conocidas, con trayectorias que garanticen lo más posible que todo se lleve con
tranquilidad y efectividad, así como abanderen iniciativas a favor de la
población ante sus diversas necesidades en los 28 municipios que forman
la Diócesis de Córdoba.