Los desechos tóxicos, propiedad de Fortuna
Silver Mines, provocaron la contaminación del río El Coyote, el cual sirve para
el pastoreo de animales, y los pozos que abastecen a la comunidad
PATRICIA BRISEÑO/
CORRESPONSAL/ EXCELSIOR
Minera canadiense reconoce desbordamiento de sus desechos en río. Foto: Patricia Briseño/ Corresponsal |
OAXACA, OAXACA.- La compañía canadiense Fortuna Silver Mines
reconoció que las lluvias recientes causaron un desbordamiento de los residuos
sólidos y líquidos de su subsidiaría la mina La Trinidad, ubicada en la
comunidad de San José del Progreso, que contaminó en el río El Coyote, de
Magdalena Ocotlán.
A través de
un comunicado, fechado en Vancouver, la minera trasnacional aceptó que el
volumen de lluvias causó el derramamiento del estanque de emergencia, donde se
acopian los residuos de la extracción de la mina, conocida como “presa de
jales”.
El
desbordamiento ocurrió durante aproximadamente dos horas y tuvo un registro de
mil 500 metros cúbicos de agua, que transportaba sedimentos y pequeñas
cantidades de relaves finos, desde el sistema de drenaje de la instalación hasta
el río El Coyote.
Conviene
recordar que los afectados expusieron que las lluvias registradas la semana
pasada provocaron el desbordamiento en el embalse de retención de sólidos
sueltos y líquidos de desecho de la explotación minera de la empresa Cuzcatlán,
filial de la canadiense.
Los
desechos tóxicos, propiedad de la empresa canadiense Fortuna Silver Mines,
provocaron la contaminación al verter en el río El Coyote, del que dependen
cientos de familias campesinas del municipio de Magdalena Ocotlán, a una hora
al sur de la ciudad de Oaxaca.
Según la
denuncia, el río desemboca en el paraje conocido como La Ciénega, donde se
encuentra un retén de agua, que sirve para el pastoreo de animales, y los pozos
que abastecen a la comunidad.
La empresa
canadiense aseguró que está mitigando el riesgo de desbordamientos futuros al
aumentar inmediatamente su capacidad de bombeo en el estanque de contingencia.
Aparte de
esto, observó que los relaves de la mina La Trinidad están libres de metales
pesados u otros contaminantes y se caracterizan por ser estériles, por el
monitoreo y muestreo constante.
La compañía
dijo que notificó el desbordamiento a funcionarios de la Procuraduría Federal
de Protección al Ambiente (Profepa), el día del incidente, y actualmente,
trabaja con autoridades federales, estatales y locales, mientras se realizan
inspecciones en sus instalaciones.