El ministro de Finanzas dijo que el gasto del
gobierno central aumentará en un 10 por ciento este año, más que el crecimiento
del PIB de 7% previsto a comienzos del año, de acuerdo a una declaración
publicada por el Banco Popular de China.
Reuters/ El Financiero
PEKÍN.-- Los mercados financieros de
China deberían permanecer estables y el yuan no está en camino a una
devaluación de largo plazo, mientras que el gasto fiscal se acelerará
más de lo esperado este año, dijeron altos funcionarios del país al grupo G20.
El
ministro de Finanzas Lou Jiwei dijo que el gasto del gobierno central aumentará
en un 10 por ciento este año, más que el crecimiento del PIB de 7 por ciento
previsto a comienzos del año, de acuerdo a una declaración publicada en el
sitio web del Banco Popular de China.
El
comunicado del banco central fue divulgado al final de una cumbre de
representantes de Finanzas de las 20 mayores economías del mundo celebrada este
fin de semana en Ankara.
China también elevará los pagos de dividendos para empresas estatales designadas, a fin de compensar por cualquier déficit.
La
segunda mayor economía del mundo se dirige a su menor expansión en 25 años este
2015 y sus mercados bursátiles se han derrumbado ante este escenario, perdiendo
casi un 40 por ciento desde mediados de junio, lo que ha puesto nerviosos a los
inversores de todo el mundo.
La fuerte
caída de las acciones chinas arrastró a la bolsa de Hong Kong a su menor nivel
en dos años el miércoles. Los mercados financieros de China estuvieron cerrados
el jueves y el viernes por la conmemoración de los 70 años desde el fin de la
Segunda Guerra Mundial.
El
crecimiento del PIB de China permanecerá cerca de un 7 por ciento, tal como se
pronosticó a inicios del año, y la nueva tasa de expansión podría seguir en el
mismo nivel por cerca de cuatro a cinco años, dijo Lou. El Gobierno no está
preocupado especialmente por las fluctuaciones trimestrales de la economía y
mantendrá sus políticas macroeconómicas, añadió.
China ya
no puede depender de medidas de política para lograr un crecimiento de entre 9
y 10 por ciento, puesto que podría tomar varios años digerir el exceso de
capacidad industrial y de inventarios, dijo el ministro.
El país
deberá sufrir "dolores de parto" en los próximos cinco años mientras
intenta completar sus principales reformas estructurales al 2020, añadió Lou.
La
calidad del crecimiento, sin embargo, ya está mejorando porque se crearon 7
millones de empleos durante el primer semestre del año, el consumo está
superando a la inversión en el aporte a las cifras de expansión y el balance de
pagos se está equilibrado, indicó.