La
arquidiócesis deberá publicar los datos de todos los religiosos involucrados en
casos de abusos a menores; el proceso tardará unas semanas
Notimex
LOS
ÁNGELES, 8 de enero.- Los nombres de sacerdotes y
religiosos que hayan sido acusados de molestar sexualmente por décadas a menores,
serán revelados sin restricción, ordenó la jueza de Los Angeles, Emily Elias.
Elias, magistrada de la Corte Superior de Los Angeles, instruyó que la
arquidiócesis de Los Angeles difunda todos los nombres de sacerdotes y
empleados acusados de esos delitos.
A petición de Los Angeles Times y de la agencia informativa AP, la
jueza resolvió la víspera que la arquidiócesis haga públicos los nombres de
todos los sacerdotes y cualquier jerarca católico involucrado en actos de
pederastia.
La arquidiócesis es la más grande representación católica en Estados Unidos
con unos 5 millones de miembros.
Como uno de los más grandes escándalos de abuso sexual en la iglesia
católica cometidos por sacerdotes en las últimas décadas, existen aquí más de
30 mil páginas de documentos acusatorios.
El abogado Raymond Boucher, quien representa a unas mil víctimas de abuso
sexual de sacerdotes, señaló que sus clientes esperan conocer identidades de
jercarcas que podrían haber estado enterados de acusaciones de abusos.
“Vicarios, obispos, miembros del Vaticano, tres o cuatro cardenales entre
ellos el cardenal de Los Angeles Roger Mahony”, mencionó Boucher.
Mahony se retiró de sus funciones eclesiásticas en 2011, después de haber
sido devastado por acusaciones y demandas de víctimas.
En medio de ese escándalo, Mahony encabezó el acuerdo extrajudicial que
ofreció en 2007, 660 millones de dólares con más de 500 víctimas que habían
demandado a la iglesia.
La presidenta de la Red de Sobrevivientes de Abusados por Sacerdotes (SNAP,
por sus siglas en inglés), Bárbara Blaine, expresó su beneplácito por la
resolución judicial.
“Agradecemos que un juez de California rechace proteger a directivos
corruptos católicos que querían mantener en secreto los registros de abusos”,
apuntó en un comunicado.
“Por décadas la jerarquía católica de Los Angeles había logrado mantener
selladas miles de páginas de documentos incriminatorios”, aseguró.
“Por la tenacidad y el coraje de cientos de las víctimas eso terminará
pronto y nuestros niños estarán más seguros”, asevero Blaine.
Tras la resolución judicial, se podría llevar de tres a cuatro semanas para
que la arquidiócesis haga públicos los documentos.
La iglesia había hecho una petición infructuosa a la jueza para que algunos
nombres de directivos no fueran hechos públicos con el propósito de no afectar
la imagen de la iglesia en culpa por asociación.
Los records incluyen expedientes personales, reportes de investigación,
cartas de padres de víctimas y correspondencia con el Vaticano.