Dos jóvenes viajaban drogados por las calles de East Sussex,
Inglaterra a alta velocidad mientras venían filmando lo que serían sus últimos
momentos de vida.
Este vídeo desgarrador es una prueba más de que el alcohol, las drogas y la velocidad no
van juntas. En él, podemos ver a Michael Owen de 20 años, quien conducía a alta
velocidad por las calles de East Sussex, Inglaterra, mientras que su copiloto, Kyle Careford de 21 años lo filmaba.
En el video se
escucha como Kyle le dice a Michael "Slow down" (baja la velocidad),
punto que en algún momento ignora y eleva la velocidad a 90 Km/h antes de
estrellarse.
Según
declaraciones, ambos estaban drogados y en estado de
ebriedad, por lo que la combinación los llevó a filmar sus
últimos momentos con vida antes de estrellarse con la pared de una Iglesia.
A pesar de que el
accidente fue en abril, las imágenes acaban de ser publicadas en Youtube con la finalidad de que los jóvenes
hagan conciencia de las consecuencias de manejar rápido y en estado
inconveniente.
“Realmente no sé
qué hizo que los muchachos hicieran lo que hicieron, pero los culpo por las
decisiones que tomaron esa noche”, dijo Kat, madre de Michael, quien autorizó la divulgación de las
imágenes como material de conciencia para otros.