Un policía israelí confunde a un migrante eritreo con un agresor
palestino y le dispara, pero una vez en el suelo el hombre es atacado por
ciudadanos, que lo golpean; finalmente fallece
Por: Noticieros Televisa
JERUSALÉN, Israel, oct. 19, 2015.- Un migrante eritreo, baleado por un guardia de seguridad
israelí y atacado después por peatones que lo confundieron con el autor de un
ataque mortal en una estación de autobús, falleció a consecuencia de sus
heridas, dijeron funcionarios hospitalarios israelíes este lunes.
El ataque por error al ciudadano eritreo,
cuyas razones se desconocen, refleja el estado de nerviosismo en que se
encuentran los israelíes tras semanas de ataques con un patrón aparentemente
aleatorio y perpetrados por lobos solitarios palestinos.
"Es terrible. Esto demuestra la terrible
situación en la que estamos", dijo el portavoz del Ministerio de
Exteriores, Emmanuel Nahshon.
El diario Yediot Ahronot no dio pie a la
ambigüedad al explicar por qué fue atacado el hombre, identificado como Mulu
Habtom Zerhom. Su titular del lunes decía: "Sólo por el color de su
piel".
La subdirectora general del Soroka Medical
Center, la doctora Nitza Neuman-Heiman, dijo a la radio del ejército que el
migrante llegó al hospital en "estado muy grave" y falleció el
domingo en la noche por las heridas de bala y las sufridas por el ataque
ciudadano. El centro dijo que recibió los disparos en el abdomen.
El ataque en la estación central de autobuses
de la ciudad de Beersheba, en el sur del país, fue uno de los más sangrientos
de la ola de violencia que dura ya un mes. Un soldado israelí de 19 años murió
y otras nueve personas resultaron heridas cuando un asaltante árabe, armado con
una pistola y un cuchillo, abrió fuego.
Cibersitios israelíes de noticias publicaron
imágenes de cámaras de seguridad que muestran al migrante eritreo arrastrándose
por el suelo y al guardia de seguridad disparándole, al confundirlo con el
autor del ataque en la estación de autobuses.
La grabación muestra también cómo una turba
de israelíes enfurecidos rodeó al hombre mientras yacía tumbado en un charco de
sangre. Le arrojaron un banco y recibió patadas en la parte de atrás de la
cabeza, mientras un agente israelí y unos cuantos peatones intentaban
protegerlo.
Un israelí que se identificó sólo por su
nombre, Dudu, dijo a la radio del ejército israelí que lamentaba haber
participado en el ataque al migrante eritreo.
"Supe por la gente que era un
terrorista. Si hubiese sabido que no era una terrorista, créame, le habría
protegido como a mí mismo", dijo. "No dormí bien por la noche. Me
siento enojado".
La policía busca arrestar a los civiles
israelíes que "golpearon de forma agresiva" y patearon al hombre
eritreo "mientras estaba tendido en el suelo y no suponía una
amenaza", dijo la portavoz de la policía, Luba Samri.
En el último mes, nueve israelíes y un
eritreo han fallecido en ataques palestinos, la mayoría de ellos
apuñalamientos. En ese mismo periodo, 41 palestinos murieron por fuego israelí,
incluyendo 20 considerados atacantes por Israel. El resto perdió la vida en
enfrentamientos con tropas de Tel Aviv.
Los ataques, que siguen un patrón
aparentemente aleatorio y son perpetrados por personas sin afiliación conocida
a grupos insurgentes organizados, desconciertan a Israel.
Zerhom, el eritreo, estaba en Beersheba para
renovar su visado israelí, dijo a la radio del ejército Sagi Malachi, su jefe
en el invernadero en el que trabajaba.
Unos 34.000 migrantes eritreos viven en
Israel. Dicen huir de las persecuciones y los conflictos y buscan asilo. Tel
Aviv no les concede el estatus de refugiado pero tampoco los deporta a Eritrea
en línea con la ley internacional para no poner en riesgo sus vidas. Los
migrantes deben renovar sus permisos cada mes o dos, según activistas.
La policía israelí identificó al asaltante de
la terminal de autobuses como Mohannad Al-Okbi, un ciudadano árabe israelí de
21 años, natural de la localidad beduina de Hura, en el sur del país. Murió por
los disparos recibidos durante el incidente. Agentes de seguridad detuvieron a
uno de los familiares de al-Okbi bajo la sospecha de haber ayudado al joven,
dijo la vocera de la policía, Luba Samri.
La agencia de seguridad israelí Shin Bet dijo
el lunes que el asaltante no tenía antecedentes de haber participado en
actividades insurgentes.
La oleada de violencia estalló hace un mes
con motivo del Año Nuevo judío, alimentada por los rumores de que Israel estaba
conspirando para tomar el control del lugar más sagrado en Jerusalén, conocido
como Monte del Templo por los judíos y que acoge la mezquita Al-Aqsa, el tercer
lugar sagrado para los musulmanes y un símbolo nacional clave para los
palestinos.
La oleada de violencia se extendió a barrios
árabes de Jerusalén oriental y luego a Cisjordania, Gaza e Israel.
Israel
niega las acusaciones, diciendo que no tiene intención de cambiar el statu quo
del lugar, que los judíos pueden visitar pero donde no pueden orar.