La legisladora de Morena reconoció que su reintegración al trabajo legislativo no será fácil, pues el dolor como madre perdurará el resto de sus días
MILENIO/ VANGUARDIA
La diputada señaló que trabajará de la mano con Andrés Manuel por un México mejor / Foto: Cuartoscuro |
La diputada Carmen Medel anunció su regreso a las actividades parlamentarias en el Palacio de San Lázaro, 18 días después del asesinato de su hija, Valeria Cruz.
Medel se declaró respetuosa de los procedimientos y de las acciones legales para llegar al esclarecimiento de los hechos, por lo cual, dijo, se limitará a hacer declaraciones sobre su actividad legislativa hasta tener certeza de lo ocurrido.
“En memoria de mi pequeña regresaré a la Cámara de Diputados con mayor fuerza para ejercer mi función legislativa con el mayor de los decoros; para responder de manera efectiva ante las exigencias que los tiempos nos imponen y, a su vez, fungir como un punto de referencia ante lo que muchos de los mexicanos vivimos día con día”, indicó.
La diputada de Morena, Carmen Medel Palma. / Foto: Twitter |
En un comunicado, la legisladora de Morena reconoció que su reintegración no será fácil, pues el dolor como madre perdurará el resto de sus días, pero expresó su seguridad de que los inminentes cambios y la conjugación de esfuerzos y compromisos entre la sociedad y el gobierno coadyuvarán a generar ambientes más seguros y libres de violencia, instituciones confiables y, sobre todo, el México que todos merecemos.
Valeria Cruz, estudiante de medicina de 22 años de edad, fue asesinada el 8 de noviembre pasado en un gimnasio de Ciudad Mendoza, Veracruz, al ser presuntamente confundida con otra persona.
Valeria Medel / Foto: Especial |
Medel recibió una llamada telefónica para notificarle de los hechos cuando se encontraba en el pleno de la Cámara de Diputados, lo que le provocó una crisis nerviosa y dio lugar a la suspensión la sesión ordinaria, después de la condena al crimen y una expresión de solidaridad por parte de todas las fracciones parlamentarias.
La Fiscalía General del Estado de Veracruz detuvo tres días después del crimen a cinco sospechosos, pero apenas horas después liberó a cuatro de ello por falta de pruebas para vincularlos como presuntos responsables del asesinato.