Reforma se aprobó vía
fast-track
Congreso local se ha caracterizado por el servilismo
En 2016 se reducirá la capacidad de generar empleos
Xalapa, Veracruz; 09 de Octubre del 2015.- Es
una desgracia que a pesar del repudio generalizado del sector empresarial la
mayoría priista aprobara del 2 al 3 por ciento el Impuesto sobre Erogaciones
por Remuneraciones al Trabajo Personal (impuesto a la nómina), lamentó el
Coordinador del Grupo Legislativo del partido Acción Nacional, Joaquín Rosendo
Guzmán Avilés.
Durante la Cuarta
Sesión Extraordinaria del Segundo Año de Ejercicio Constitucional, los
diputados panistas expusieron el riesgo que se correrá al acrecentar la carga
tributaria cuando se tiene un Estado con opacidad y endeudado, no obstante la
prioridad fue aprobar vía fast-track una iniciativa a modo.
El legislador panista dijo que no hubo argumento sólido para
avalar la reforma al Código Financiero más que un repetido: “se fortalecerá la
recaudación y permitirá obtener mayores ingresos de participaciones federales”.
A esto, argumentó que con lo que ya se recibe de la federación
no se perciben obras, no se espera algo distinto en dado caso de que aumenten
las participaciones, dado que los resultados positivos no han sido una de las
características del gobierno actual.
Para desfortuna de los veracruzanos la mayoría priísta en la
legislatura actual no ha hecho más que servir al gobernador y aprobar políticas
públicas sin beneficios, abundó el diputado albiazul.
"Lo único que ha hecho el partido tricolor es aprobar
reformas en contra de los campesinos, taxistas, maestros, ancianos, maestros y
esta es la segunda vez que se golpea a los empresarios, primero fue con la
famosa Ley de Salud de Protección a los Jóvenes y ahora se les aumentan los
impuestos”, objetó.
Señaló que es tal la falta de respeto y de compromiso a los
ciudadanos que hubo quienes tomaron la tribuna para confrontar a los
empresarios asistentes.
Hay pronósticos que para 2016 este gravamen afectará a la
creación de empleos lo que significa un menor crecimiento económico; hay una
total contradicción entre el discurso y los hechos, concluyó Guzmán Avilés.