REFLEXIÓN MATUTINADE UN VIEJO LOBO DE
MAR.
Sábado 12 de septiembre
del 2015.
La empresa de investigación espacial
Nano Racks que lleva varios años estudiando cómo afecta el espacio exterior al
whisky, concluyó sus experimentos realizando una comparación entre una muestra
que estuvo tres años en el espacio y otra que permaneció el mismo lapso en
tierra. Los enólogos que realizaron las catas encontraron claras diferencias,
tanto en aroma como en el sabor de ambos, por lo que parece que al whisky
no le sientan muy bien los viajes espaciales, lo que puede ser grave para los
astronautas pues es bien sabido que esta espirituosa bebida, aparte de que no
deja “cruda” posee varias propiedades medicinales y sobre todo es indispensable
para “andar como astronauta” y pasar un buen
SABADITO ALEGRE.
POR; Edwin
Corona y Cepeda
Dedicado a mi sobrino político Kevin
Coll
Estos son, de una
manera enunciativa, más no limitativa, los principales beneficios saludables
del Whisky, los cuales pueden ser ampliados por una constante práctica y
degustación continua.
1.- Estimula la memoria.- Los antioxidantes
contenidos en esta bebida, como el etanol, contribuyen a la salud del cerebro.
Además el alcohol que se forma por su destilación intensifica la circulación
sanguínea, contribuyendo a la estimulación cerebral. Tal vez por eso se dice
que era la bebida favorita del famoso dramaturgo William Shakespeare.
2.- Alivia el estrés y calma los nervios.- Esto siempre y
cuando se beba con moderación, pues de lo contrario se pone uno como agarra
pollos.
3.- Combate el exceso de peso.- En comparación con
otras bebidas alcohólicas, el whisky es bajo en contenido de calorías, libre de
grasa y colesterol, por lo que es muy recomendable para las gorditas o para las
flaquitas que se encuentran a dieta. No importa el diámetro de la cintura, lo
importante es que se pongan como placa de tráiler (hasta atrás).
4.- Reduce el riesgo de padecer una
apoplejía.- El whisky previene la acumulación de colesterol en el sistema
cardiovascular y puede eliminar, también, el exceso de colesterol en el cuerpo.
Además flexibiliza las paredes de las arterias, reduciendo la posibilidad de
que se produzcan obstrucciones. Todos los factores mencionados contribuyen a la
prevención de padecer una apoplejía.
5.- Reduce el riesgo de cáncer.- El whisky contiene
un antioxidante llamado “ácido elágico” un ácido que aleja al ADN de entrar en
contacto con los compuestos que causan cáncer, como las nitrosaminas y los
hidrocarburos aromáticos policíclicos. Además se dice que puede ayudar al
cuerpo contra el daño provocado durante la quimioterapia.
6.- Ayuda en la digestión.- Durante siglos el
whisky fue considerado como un digestivo, sobre todo cuando es tomado después
de una copiosa comida. La composición del whisky y su alto contenido de
alcohol, aparte de ser un supresor del apetito colabora eficazmente en el
proceso digestivo de guacarear.
7.- Alarga la vida.- Los antioxidantes
contenidos en esta bebida contribuyen a combatir los radicales libres, siendo
estos los mayores causantes del envejecimiento. Estas dos características (6 y
7) ayudan al cuerpo a vivir una vida más larga y saludable.
8.- Es la bebida ideal para
diabéticos.- El whisky contiene cero carbohidratos, por lo que no afecta los niveles
de azúcar en la sangre y es lo que lo hace la opción número uno para los bebedores
diabéticos.
9.- Mejora el funcionamiento del
corazón.- Al igual que el vino tinto, el whisky ayuda a conservar el
funcionamiento eficiente del corazón. Además reduce el riesgo de crear coágulos
sanguíneos, por lo que puede prevenir accidentes cerebro-vasculares y ataques
cardiacos ya que los antioxidantes del whisky también inhiben la oxidación de
lipoproteínas de baja densidad, un factor principal para el desarrollo de las
enfermedades cardiacas.
10.- Mejora la salud cerebral.- El whisky no nos va
a quitar lo pendejo, pero su consumo moderado (ni menos de tres copas, ni más
de 125) reduce el riesgo de padecer Alzheimer (chochez) y la demencia senil
mejorando las funciones cognitivas.
11.- Es un remedio eficaz en el
tratamiento de gripe y resfrío.- El whisky, (como el tequila) es
conocido por sus efectos positivos contra la alergia y los resfriados, es un
eficaz jarabe para la tos, para “aclarar” la voz de los cantantes y mariachis y
para las personas que sufren de “picazón” en la garganta, ya que el alcohol que
contiene mata a estas bacterias.
Es un eficaz remedio (igual que el tequila)
para la gripe y el resfriado siguiendo la siguiente receta: ponga al fuego un
jarrito, agregue dos cucharadas de miel de abeja, el jugo de un limón y
un “caballito” (1 onza) de whisky o tequila. Deje que hierva, bébalo lo más
caliente que pueda. Acuéstese, arrópese y levántese hasta el día siguiente. Si
no se le quita la gripa va a dormir como angelito.
Algo de historia.- Las primeras
destilaciones de esta bebida fueron registradas a mediados del siglo XV por los
irlandeses y escoceses (de allí la apelattion de “scotch”)
quienes, tomando en cuenta sus propiedades medicinales lo bautizaron como Aqua Vitae (Agua
de la Vida) agarrando, bajo ese pretexto, unas papalinas espantosas.
Durante su estancia en tierra era la bebida
preferida del corsario Francis Drake y durante la Guerra de Independencia de
los Estados Unidos fue utilizada como estimulante de las tropas americanas y
como moneda de cambio y se dice que George Washington fue propietario de
una destilería de whisky en Mount Vernon.
En la época de la prohibición de consumo de alcohol
en los Estados Unidos (1920 – 1933) el whisky del tipo bourbon era la única
bebida alcohólica en la que estaba permitido su consumo bajo prescripción
médica. Así que para ponerse en estado burro había que hacerlo bajo receta.
En esa época, el patriarca del Clan Kennedy, Joseph
P. Kennedy montó una destilería clandestina de whisky en Chicago y se dice que
de allí deriva la fortuna del Clan Kennedy.
Durante la Segunda Guerra Mundial fue la bebida
preferida (1939 - 1945) del Primer Lord del Almirantazgo Sir Winston Churchill
y se dice que la longevidad de la Reina Isabel II de Inglaterra se debe a que
todos los días se avienta su “alipus” de whisky.
El whisky es una bebida que puede degustarse sola,
con hielo (en las rocas), con agua natural o mineral o con leche. Con lo único
que es un pecado mortal tomarlo es con Coca –Cola.
Y con esto me despido, no sin antes decir SALUD por
Chabelita de Escocia.
La rapidez con la que el gobierno mexicano en boca de José Antonio Kuri
Breña ex Secretario de Relaciones Exteriores y de Miguel Ángel Osorio Chong,
Secretario de Gobernación respondió en contra de las declaraciones
efectuadas el 6 de junio por el aspirante a candidato a la presidencia de
Estados Unidos por el Partido Republicano Donald Trump, las cuales fueron
rápidamente reforzadas por expresiones similares de artistas, escritores
y reporteros a modo, me han hecho pensar en que hay algo más que la defensa de
“nuestra dignidad” como señalaron algunos políticos en tan rápida defensa,
mientras casos como el de Ayotzinapa, Tlataya, Apatzingan, la casita blanca, la
fuga del Chapo, la liberación de Caro Quintero y ahora de Don Neto y mil y una
circunstancias más, me hacen pensar que:
DEBEMOS APOYAR A
DONALD TRUMP.
POR: Edwin
Corona y Cepeda.
De nadie es desconocido que desde el régimen
presidencial de Luis Echeverría, los Estados Unidos están cada día más
metidos dentro de los avatares de la política mexicana, prueba evidente de ello
son las constantes devaluaciones que nuestra moneda ha sufrido desde aquel
entonces, sumiéndonos en una pobreza de la que, según parece, nunca vamos a
poder salir.
Pero, si apoyamos a Donald Trump y no hacemos caso
de lo que nos cantan los jilgueros oficiales, ejemplo de falsedad, corrupción y
desvergüenza, veremos que existen grandes posibilidades de recuperación.
Me explico:
Actualmente los intereses de los Estados Unidos no
solamente están muy metidos en la actividad política en nuestro país, donde
ponen a su antojo los candidatos que les convienen, empezando por el Presidente
de la República, sino que se han apoderado radicalmente de nuestra economía
nacional impidiendo el desarrollo de proyectos de interés nacional que
atentan contra los intereses de las empresas trasnacionales frenando, o
más bien dicho, fregando nuestro desarrollo como país, como es el caso de la
carencia de una marina mercante y la destrucción de sistemas arrecifales
completos para dar paso a instalaciones portuarias que solo a ellos benefician.
Cada vez la infraestructura carretera (en manos de extranjeros) favorece a las
empresas trasnacionales, la política fiscal favorece más a curas y extranjeros
que a los compatriotas, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte
(TLCAN) favorece más a nuestros “ buenos vecinos” que a nosotros y prueba de
ello es el rechazo a mexicanos que solicitan su visa para viajar al Canadá o de
los pequeños importadores a los que se les rechaza y decomisa su escasa
producción.
Y así puedo seguir poniendo ejemplos que se
multiplican hasta el infinito, pero vamos a analizar qué sucedería si Mr.
Donald Trump llega a ser el Presidente de los Estados Unidos.
Lo primero que haría sería el retiro ipso
facto de la Embajada de los Estados Unidos en México, con lo que, de
inmediato se eliminaría un nido de espías y “asesores militares” de nuestras
corruptas fuerzas policiales. Esto además traería la consecuente “ruptura
diplomática” lo que nos acarrearía un enorme beneficio pues los
Estados Unidos ya no se inmiscuirían más en nuestros asuntos internos.
El segundo paso sería el de construir su “super
muro fronterizo”, con lo que no solo estaría negando el paso a muchos
desamparados compatriotas, sino que estaría cortando de tajo la principal ruta
de entrada de la droga a los Estados Unidos, por lo que los
narcotraficantes tendrían que buscar otras rutas pues este sería su principal
obstáculo y como el mercado interno mexicano en el consumo de
estupefacientes aún es muy pequeño, los problemas, sobre todo de seguridad,
quedarían notablemente reducidos y todo mundo alabaría la eximia belleza de
nuestros “pueblos mágicos”, hoy convertidos en verdaderos pueblos fantasmas.
México, se ha señalado, es el trampolín
por donde pasa la droga que viene del sur, pero indudablemente que los Estados
Unidos son la alberca, razón por la que los entrenadores de esta especialísima
natación tendrán que buscar otros carriles de competencia.
Es casi seguro que si Donald Trump
llega a ser Presidente de los Estados Unidos, seríamos testigos de la
deportación de millones de mexicanos y de una gran movilidad, forzada o
voluntaria, de enormes masas de compatriotas y aunque en un principio nos
parezca terrible y hasta inhumano, pensemos en la fabulosa cantidad de dinero,
que por pánico, esta gente estaría enviando desde endenantis a
sus familiares o amigos radicados en México. Si por el momento esta es la
segunda fuente de ingresos a nivel federal, pensemos que esto, en lugar de
perjudicarnos nos va a favorecer, pues ya no necesitaremos del cacareado
“blindaje” ante otra devaluación.
Analicemos que la movilización de
toda esa gente y su nueva familia a su lugar de origen va a cambiar la
estructura social del país, pues ya vienen acostumbrados a un estilo de vida
diferente, a ver a una sociedad y un gobierno que funciona mucho mejor
que en México, en pocas palabras a una vida más digna y llevadera, de respeto,
de disciplina y de comodidad.
Esta gente regresaría a México
para realizar el cambio que tanto anhelamos, que tanto soñamos, que tanto
necesitamos, un cambio pacífico, sin partidos políticos que lo coarten y
engañen, que presionarán al gobierno para que trabaje en beneficio del país y
no del país que los obligó a inmigrar en busca de mejores horizontes, de
mejores condiciones de vida
Muchos de ellos salieron huyendo de México para
progresar, no solo económicamente, sino como personas, con mayor cultura, con
mejor educación, o salieron a aprender, a especializarse, a ser útiles a ellos
mismos y a la sociedad con la que convivían y regresarán con esos conocimientos,
con esas habilidades para aplicarlos y ver crecer a su Patria y a compartir lo
aprendido para que su país mejore.
Pensemos, por un momento, en la enorme fuerza de
trabajo que representan los mexicanos en los Estados Unidos, donde, Fox
dixit, realizan trabajos que hasta los negros rechazan y que, además
representan una mano de obra sumamente barata y por tanto, sumamente redituable
para las empresas gringas. Y cuando esa mano de obra deje de existir
gracias a Trump, las trasnacionales la van a pensar dos veces y
encontrarán que la solución será traer a México sus plantas, sus
fábricas, sus desarrollos.
O sea que los migrantes regresan y levantan la
economía y se traen, además de dinero y conocimientos a una verdadera
industria. Gracias Donald Trump.
Para cuando eso suceda, las grandes empresas
norteamericanas, prácticamente paralizadas, van a tener que negociar con un
gobierno verdaderamente elegido por el pueblo, pues a la disconformidad de los
mexicanos radicados actualmente en el país, se unirán las voces de los
migrantes y tendrán que respetar ( no como ahora que el gobierno les tolera los
contratos Out-sourcing) las leyes laborales que protegen a los trabajadores
mexicanos.
Y esto que puede ser posible si Donald Trump
triunfa, va más allá de las “indignadas protestas” emitidas por políticos
corruptos, militares narcotraficantes, comediantes léperos y sin
gracia, cantantes y músicos “mothernistas” e insoportables, que
muestran su falsa “indignación” por las declaraciones de Donald Trump
contra los migrantes, pero que, aparte de no tener madre, tampoco
tienen Patria, pues lo único que les importa es tener dinero, dinero y
más dinero.
Ante este panorama, apoyemos a Donald Trump.
COMENTARIOS.
Descontaminación
verdadera de la Bahía y Playas.- Ha
sido una vacilada de políticos el cacareado proyecto de “Saneamiento de la
Bahía de Veracruz”, donde además del sano funcionamiento de las plantas
de tratamiento de aguas residuales indispensables para el saneamiento de
playas, es urgente construir ejes hidráulicos que conduzcan las aguas en ductos
paralelos a la costa, no tiene caso una o dos plantas si las corrientes marinas
tienden a la homogenización de las aguas residuales con las de playa donde se
bañan los turistas. Ing. Luis Martínez Wolf
PICADAS JAROCHAS.
ÚLTIMA VOLUNTAD.
Mi compadre “El Sapo” es tan feo, pero tan feo, que ha dispuesto
como su última voluntad que, cuando se muera, lo entierren embarrado de
mantequilla para que así puedan comérselo con gusto los gusanos
¡QUE TENGAN UN BUEN
DÍA!
Comentarios y sugerencias al correo edwin_coronaii@hotmail.com