Es ligado al asesinato del periodista Armando Saldaña
Morales
Tezonapa, Ver.- Un presunto integrante del crimen organizado,
investigado por la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Oaxaca por el
asesinato del periodista de la Ke Buena de Tierra Blanca, Armando Saldaña
Morales, fue ejecutado a balazos por dos sicarios que lo interceptaron cuando
compraba un refresco en el depósito de cerveza Servi-Modelo de la calle Los
Pinos y avenida Jiquilpan, en la zona limítrofe de Veracruz y Oaxaca.
Los asesinos llegaron
en una motocicleta, se emparejaron a la banqueta donde vieron a su objetivo, le
dispararon a boca-jarro en cinco ocasiones y al verlo tirado y muerto,
escaparon por la avenida Brena Torres con dirección a Cosolapa, Oaxaca.
Alejandro Tapia,
mejor conocido como “El Tapia”, con domicilio en la colonia Vista Hermosa de
Cosolapa, quedó abatido a balazos, boca arriba, sobre la banqueta del depósito
Servi-Modelo.
Allegados a las
autoridades dijeron que “El Tapia”, supuestamente estaba ligado a la pandilla
de la Mara Salvatrucha (MS) y formaba parte en varias investigaciones en Veracruz
y Oaxaca por supuestos actos delictivos, pero se abstuvieron en dar pormenores
sobre la situación.
Las Agencias Estatal
de Investigaciones (AEI) de Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca, y Veracruzana de
Investigaciones (AVI) intercambiaron información sobre el ejecutado y anoche
mismo se confirmó que se trataba de “El Tapia”
pero el cadáver permanecía oficialmente como desconocido en el
anfiteatro de una funeraria local de Córdoba.
Informes
extraoficiales, señalan que la víctima era pareja sentimental de una mujer
identificada como Erendira “N”, a quien esperaban se presentara a identificarlo
oficialmente.
El asesinato ocurrió
a las 14:30 horas del viernes, cuando Alejandro Tapia llegó al depósito de
cerveza Servi-Modelo, de la calle Los Pinos
y avenida Jiquilpan, para comprar un refresco.
De repente fue
interceptado por dos sujetos que viajaban en una motocicleta, se pararon a
corta distancia y dispararon en varias ocasiones contra su objetivo hasta verlo
tirado y muerto sobre la banqueta.
Una de las balas se
le incrustó en el cuello, otro en el brazo izquierdo y el resto en el cuerpo,
ocasionando su muerte al instante.
Las detonaciones
provocaron que algunos comercios del área de Veracruz y Oaxaca cerraran
cortinas mientras transeúntes corrieron
a ponerse a salvo, pues según dijeron, “escuchamos una ráfaga de
balas y después vimos a “El Tapia”
tirado y muerto”.
Algunos curiosos se
acercaron a identificar a la víctima, lo fotografiaron y después
escaparon antes de la llegada de la Policía Municipal para evitarse
problemas.
Gendarmes preventivos
de Tezonapa acordonaron la zona y pidieron la intervención de las autoridades
ministeriales para las diligencias e investigaciones necesarias.
La Agencia
Veracruzana de Investigaciones (AVI) realizó las primeras tareas en torno al
asesinato y apoyado con investigadores de Oaxaca conoció que el hoy extinto formaba
parte de una investigación por homicidio y su fotografía estaba boletinada
desde hace varios meses por sus nexos con un grupo fuera de la ley.
El departamento de
Servicios Periciales de Córdoba aseguró cinco cartuchos percutidos
(presuntamente calibre .9mm) en la escena del crimen y una gorra negra de la
víctima.
