La
falta de preparación académica causa ineficiencia administrativa, según el
Instituto Mexicano de la Competitividad
Lilian Hernández
CIUDAD
DE MÉXICO, 5 de enero.- Una de las principales
debilidades de los gobiernos municipales es la escasez de alcaldes y
funcionarios con la suficiente preparación académica y habilidad para analizar
e interpretar información compleja que necesitan a la hora de implementar
políticas públicas y operar los servicios públicos.
Es así como la escolaridad de los presidentes municipales influye en su
gestión, ocasionando muchas veces altos niveles de error e ineficiencia en la
administración pública local.
De acuerdo con el Índice de Competitividad Urbana 2012, elaborado por el
Instituto Mexicano de la Competitividad (Imco), tres de cada diez alcaldes en
municipios metropolitanos no estudió una licenciatura, mientras que en
municipios rurales 66 por ciento de ellos no cuenta con una profesión, lo cual
incide en las decisiones que toman para llevar a cabo su administración.
Si bien es cierto que en un mal gobierno municipal influyen varios aspectos,
las deficiencias educativas de las autoridades intervienen en gran medida en
las acciones que realizan, pues el desconocimiento de aspectos técnicos suele
llevar a los alcaldes a tomar malas decisiones de gobierno.
El estudio del Imco detalla que un alcalde debe tomar decisiones en temas
diversos, desde el manejo de residuos sólidos hasta la seguridad pública, y por
tal motivo necesita tener conocimientos que suelen ir de la mano de la
educación superior, de la que en promedio seis de cada diez no tiene en
regiones rurales.
Ante la ausencia de esa preparación profesional, muchas de las acciones de
gobierno que emprenden tienden a “ser un universo de improvisación y
experimentación constante en la gestión pública”, subraya la investigación Los
gobiernos municipales a debate, elaborado por el Centro de Investigación y
Docencia Económicas (CIDE).
“Lo anterior conduce a un escenario permanente de altos niveles de error e
ineficiencia en la administración pública local”, concluye el Índice de
Competitividad Urbana 2012, donde se revela que 73 por ciento de los alcaldes
de municipios metropolitanos sí estudió una licenciatura, maestría o posgrado.
Sin embargo, más del cinco por ciento de ellos apenas cursó la primaria; 12
por ciento sólo estudió la secundaria y nueve por ciento solamente hasta el
bachillerato.
Junto con el alcalde, funcionarios como los síndicos, regidores, secretarios
de ayuntamiento o titulares de obras públicas también muestran la misma
tendencia en escolaridad que repercute en sus decisiones de gobierno.
“Desafortunadamente, en la mayoría de los municipios en México no se valora
la experiencia de sus funcionarios más importantes, pues quienes ocupan esos
cargos a menudo cuentan con poca o nula experiencia en la administración
pública municipal”, detalla en su estudio el Imco.
Ejemplo de lo anterior, es que sólo 18 por ciento de los presidentes
municipales en regiones metropolitanas trabajó en el gobierno local antes de
asumir su actual cargo.
Cuatro de cada diez provienen de la iniciativa privada y tres de cada diez
laboraron en el gobierno federal o estatal antes de asumir el cargo de
presidente municipal, lo cual muestra que, en muchos casos, llegan a ese puesto
público con insuficientes conocimientos”.
Lo mismo ocurre entre regidores y síndicos: apenas el 17 y 19 por ciento,
respectivamente, trabajó en el gobierno municipal antes de ser elegidos.
Metas administrativas
Ello se refleja en que menos de 40 por ciento de los municipios cuenta con
un panel de control o seguimiento de objetivos y metas para revisar los
resultados de sus acciones.
La actual situación que prevalece en los ayuntamientos revela que “los
municipios deben valorar y cuidar su curva de aprendizaje, es decir, el
conjunto de habilidades y conocimientos que se adquieren y que les permita
realizar cada vez mejor una serie de funciones y tareas complejas”, concluyó el
análisis sobre la influencia que tiene el nivel académico de un alcalde en las
decisiones de gobierno.
El diputado perredista Miguel Alonso Raya afirmó que el hecho de que un
diputado o presidente municipal no tenga una educación superior es “necesario”
o de lo contrario la democracia mexicana sería excluyente y regresiva.
REZAGO
En municipios marginados la preparación de los presidentes municipales es
mínima.
Por ejemplo, en Oaxaca de los 570 municipios, 418 de ellos se rigen por usos
y costumbres y la mayoría de los encargados son analfabetas.
En regiones serranas de Veracruz o Hidalgo la falta de preparación de los
alcaldes es patente, a diferencia de zonas urbanas.
En Chiapas, por ejemplo, el alcalde de Francisco León, apenas terminó la
preparatoria, un hecho
que se repite en otros municipios.
que se repite en otros municipios.
Efectos
1.-La insuficiente preparación de algunos alcaldes provoca que los
ciudadanos tengan una gestión de mala calidad en seguridad, obras y servicios.