CRONICAS, RELATOS Y LEYENDAS DE ATOYAC, VER.
26 de enero de 2022** Se juega la parte alta de la cuarta entrada, al turno al bat se encuentra aquel joven que tiene desesperados a los jugadores del Ron Potrero pues con maestría, habilidad y velocidad tiene cerrada la posibilidad que algún batazo se convierta en hit allá por el jardín central apoyando a sus compañeros jardineros que juegan pegados a la raya del campo. Joven delgado, con gafas, que se había ponchsado en su oportunidad anterior, pero que promete mucho en el rey de los deportes. Oriundo del primer pueblo libre de América, se encuentra en tres y dos con dos outs y con corredor en segunda, con un batazo a los jardines tiene la posibilidad de poner adelante a su equipo, voltea a ver a su manager para recibir alguna seña especial, pero no, se mantiene la seña de bateo libre, dejando en sus muñecas la responsabilidad. El picher acepta la seña de su cacher, voltea a ver al corredor de segunda, presenta la bola, y en un movimiento lanza aquella que pelota que vuela alegremente hacia el home recorriendo los 60 pies que hay entre el picher y el home. El joven mira la pelota volando hacia el, y en un calculo impresionante saca aquel swing que lo llevara a la gloria, en el momento exacto, el bate choca con la pelota y toma vuelo rumbo al jardín izquierdo, aquel batazo lo llevara a la gloria. Corría el año 1950, en el "cuadro", espacio habilitado como campo de béisbol en donde hoy se encuentra la colonia chamizal, el home se ubicaba cerca de la casa de don Martiniano Ruiz y el center fild lo delimitada la casa de doña María Toriz, se llevaba aquel encuentro de béisbol en la liga local, la cual daba oportunidad a los equipos de refosarse con jugadores de la región. Ron Potrero, Aguilitas, callejeros, Sección 23, el Agrario, el Oasis, Potrero Viejo eran algunos equipos que conformaban la luga local, en ella jugaban muy buenos jugadores como Napoleón Vivanco, José Gitierrez "cocolizo" Jaime Trujillo, Isodro Verá "la culebra" Felioe Carmona Toriz "El topo", Antonio Alvarez, "Celestino Maryinez, el pijul", Celestino Gutierrez "socula", Gregorio Regalado, entre otros que se me van de la memoria.
Alrededor del campo, las familias se reunían para disfrutar de aquellos encuentros de béisbol y apoyar a su equipo favorito, también ahí llegaba doña Francisca Casas Varela "doña Pancha Casas" quien vendía junto con su esposo Juan Castro dulces y fruta de temporada, como Sandia y piña rebanadas, así como refrescos fríos como Jarochito, Titan, Pueblito sin faltar la cerveza Victoria.
Los manager hacían hasta lo imposible por llevarse el triunfo, mandaban señales, gritaban. Regalaban a algún jugador que había hecho alguna pifia, los bateadores no podían lograr hacer alguna carrera, así es como llegan a la cuarta entrada.
Aquel joven, tras pegarle a la bola en las mismas costuras empieza su carrera hacia la primera base, la pelota vuela, vuela de pronto el ampayer principal indica que la pelota va de foul, pero aquel joven con la emoción sigue corriendo sin escuchar la indicación, y es aquí donde la fanáticada empieza a gritar "paren al loco", otros simplemente gritan "loco", cuando aquel joven al fin se da cuenta que au batazo fue un gran faul, regresa a la caja de bateo, y dijera el mago Septien, "regresa a batear con la cuenta que presagia el ponche" y la "después del gran faul, viene el gran ponche" y no se equivoco el mago, aqul joven recibe su segundo ponche del día.Cuando aquel joven regreso a su tercer turno al bat, los aficionados nuevamente lo empezaron a "abuchear" gritándole "ahí va a batear el loco", Ahora si no tuvo piedad del picher, y con todo su poder saco in riflazo por todo el jardín central que fue a entrar por la ventana de doña María Toriz, esa era la única manera de meter un jonron en ese "cuadro" de nueva cuenta, la fanaticada le volvió a gritar "agarren al loco" y esto después de escuchar las " mentadas de madre" que cariñosamente mandaba doña María cuando alguien le rompía algún vidrio de su puerta o ventanas. ¿El resultado del partido? Ese no.importa, lo más memorable del partidos fue que ese día, aquí, en el cuadro de béisbol, Jaime Abad recibía el.apodo que lo inmortalizada unos años después en su paso.por la liga mexicana de béisbol, en 1952 debuta con el águila de Veracruz donde al final de la temporada en ka entrega de premios a lo mehor de la temporada se anuncia que el novato del año de la temporada 1952 es para *Jaime "el Loco" Abad*
Crónica escrita con recuerdo de aquellas charlas con jugadores de aquella época, como Felipe Carmona, Gregorio Verá, don Jaime Trujillo y otros aficionados que estuvieron en aquel memorable partido.
Recopilador: Nazario Guadalupe Cebada Morales
