El finlandés Petteri Taalas, recién
nombrado secretario de la Organización Meteorológica Mundial, durante una
conferncia de prensa sobre el reporte especial del cambio climático, hoy en
Ginebra, Suiza. Foto Ap
Afp |La Jornada
Inchon, Corea del Sur.- El mundo deberá emprender transformaciones
"rápidas" y "sin precedentes" en sectores como la energía,
la industria o las infraestructuras si quiere limitar el alza de las temperaturas
a 1,5 ºC, aseguran los expertos de la ONU sobre el cambio climático (IPCC).
En un informe de
400 páginas, cuyo "resumen para los responsables políticos" se
publica este lunes, los científicos exponen los numerosos impactos climáticos
que afronta el planeta y que podrían aumentar si las temperaturas suben más de
1.5 ºC respecto a los niveles preindustriales: olas de calor, extinción de
especies, deshielo de los casquetes polares, etc.
"Cada
pequeño episodio de calentamiento adicional importa, sobre todo porque superar
los 1.5 ºC aumenta el riesgo de cambios profundos o incluso irreversibles, como
la pérdida de algunos ecosistemas", explica Hans-Otto Pörtner,
copresidente de esta reunión del Panel Intergubernamental sobre el Cambio
Climático (IPCC por sus siglas en inglés), en la que participaron
investigadores y representantes de los Estados la semana pasada en Corea del
Sur.
Si el
calentamiento "sigue creciendo al ritmo actual" por culpa de las
emisiones de gas de efecto invernadero, se alcanzará un alza de las
temperaturas mundiales de 1,5 ºC "entre 2030 y 2052", señala el
informe basado en más de 6.000 estudios.
Y si los Estados
se ciñen a los compromisos de reducción de emisiones que presentaron en el
Acuerdo de París sobre el clima, en 2015, la subida de las temperaturas será de
3 ºC a finales del siglo XXI.
¿Qué se puede
hacer para evitar ese escenario, teniendo en cuenta que las emisiones mundiales
vinculadas a las energías volvieron a crecer en 2017?
Para el IPCC,
las emisiones de CO2 deberán caer en un 45% de aquí a 2030 para limitar el
calentamiento a 1.5 ºC, y el mundo deberá alcanzar en 2050 una
"neutralidad de carbono", es decir, que tendrá que dejar de emitir
más CO2 del que se retira de la atmósfera.
"¡No
estamos condenados a un alza de 3 °C!"
Los expertos de
la ONU piden a todos los sectores implicados que lleven a cabo "una
transición rápida" y de una magnitud "sin precedentes" para
reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Insisten en la
energía, ya que el carbón, el gas y el petróleo son responsables de tres
cuartas partes de las emisiones, y proponen varios escenarios que incluyen
distintas acciones posibles.
"El informe
da a los responsables políticos la información que necesitan para tomar
decisiones para luchar contra el cambio climático sin olvidar las necesidades
de las poblaciones", explica la sudafricana Debra Roberts, otra
copresidenta de esa reunión, que considera el informe como "un llamamiento
a la coordinación".
"Los
próximos años serán los más determinantes de nuestra historia", asegura.
Su colega
francesa, la climatóloga Valérie Masson-Delmotte, que también estuvo en Corea
del Sur, cree que el informe deja un "balance lúcido y difícil: la
política de los pequeños pasos no basta".
"Si no
actuamos ahora, nos dirigimos hacia un mundo en el que estaremos siempre
gestionando crisis", afirma. "La buena noticia es que hay acciones en
curso en el mundo, pero habría que acelerarlas para tener transiciones suaves.
La verdadera pregunta es esta: ¿estará la gente dispuesta a actuar y habrá
bastante voluntad política colectiva?".
"No estamos
condenados a un alza de 3 ºC", opina el climatólogo Myles Allen.
"Estamos ligados a nuestras acciones pasadas, pero todo es posible en el
futuro", dice el investigador británico.
Jim Skea, del
Imperial College de Londres, dijo que habían intentado "ver si las
condiciones necesarias para mantener 1.5 ºC estaban reunidas". "Sí,
las leyes de la física y de la química lo permiten, así como las tecnologías,
el cambio de los modos de vida y las inversiones. Lo último, y sobre lo que los
científicos no pueden responder, es si es posible políticamente e
institucionalmente. Enviamos el mensaje a los gobiernos, les dimos las pruebas,
les toca a ellos ahora".
La Alianza de
los Pequeños Estados Insulares, que presionó para lograr el objetivo de +1.5 ºC
en el Acuerdo de París, ha llamado este lunes a "las naciones civilizadas
a tomar sus responsabilidades aumentando sus esfuerzos para reducir las
emisiones".
"El informe
muestra que solo nos queda una oportunidad, muy pequeña, para evitar daños
impensables para el sistema climático que nos hace vivir", dice Amjad
Abdula, representante de los pequeños países insulares. "Los historiadores
observarán estas conclusiones como un momento clave en la historia de los
hombres".