El secretario de
Estado de EU, John Kerry, asegura que si no se logra un acuerdo pondrá fin a
las negociaciones
Kerry destacó que se están haciendo "avances reales hacia un acuerdo" (Reuters). |
VIENA
(AFP/CNN México) — Tanto
Washington como Teherán quieren evitar "precipitarse" para llegar a
un acuerdo sobre el programa nuclear iraní y las negociaciones seguirán
adelante, aunque el secretario de Estado de EU, John Kerry, advirtió que no
permanecería indefinidamente en las conversaciones.
Kerry declaró este jueves en Viena que está
dispuesto "a poner fin" a las negociaciones si no se toman
"decisiones difíciles".
"Si las decisiones difíciles no se
toman, estamos totalmente preparados para poner punto final a este
proceso", dijo el secretario de Estado a la prensa en la capital
austriaca, añadiendo que las conversaciones no son "indefinidas",
pero que tampoco hay que "precipitarse" para llegar a un acuerdo.
Kerry destacó que se están haciendo
"avances reales hacia un acuerdo".
Pero,
advirtió, "no nos quedaremos negociando para siempre. Aunque también
consideramos que no debemos levantarnos e irnos simplemente porque el reloj marca la medianoche",
en referencia al límite para llegar a un acuerdo.
Poco antes, el ministro de
Relaciones Exteriores francés, Laurent Fabius, había declarado a la prensa que
"aún hay problemas que son difíciles de solucionar", pero que
"al menos las cosas van encaminadas".
"Trabajaremos durante esta noche",
añadió el ministro francés, en tanto que de alcanzarse un acuerdo en las
próximas horas permitiría un examen acelerado del texto por parte del Congreso
estadounidense.
Si el Congreso de Estados Unidos no recibe el
texto antes de la medianoche de este viernes se alargará el proceso y no se
descarta que se complique su aprobación.
Pero pese a esta presión y a las casi dos
semanas de intensas negociaciones en la capital austriaca, no es seguro que se
alcance un acuerdo que ponga fin a 13 años de estancamiento, independientemente
del tiempo.
Un pacto
final, que se negocia sobre la base del acuerdo marcoalcanzado
en abril en Suiza, contribuiría al desmantelamiento de una parte de la
infraestructura nuclear iraní para impedirle la fabricación de la bomba
atómica.
A cambio, la comunidad internacional iría
retirando progresivamente las dolorosas sanciones impuestas a Irán –que niega
que su proyecto sea dotarse con armas nucleares— cuando la agencia de Naciones
Unidas encargada de la energía atómica verifique que Teherán cumple sus
promesas.
'Acuerdo
cercano'
"Nunca
Irán y sus socios han estado tan cerca de un acuerdo final. Pero todavía está
lejos de hacerse realidad. Todavía son necesarias decisiones políticas
serias", reconoció el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Mohamad
Javad Zarif, en el Financial Times.
Irán también insiste en que debería haber
cambios en el embargo de Naciones Unidas a las armas y flexibilizar las
restricciones de la venta de misiles, lo que preocupa a los rivales de Irán y
aliados de Estados Unidos en la región.