CRONICAS, RELATOS Y LEYENDAS DE ATOYAC, VER.17 de enero de 2023
Don Amando Vidals M.Las inconformidades en contra del presidente Porfirio Diaz inician alrededor ee 1906, primero con la formación de los Club antirreeleccionistas,, donde era común leer el periódico Regeneración de los hermanos Flores Magon, pero también con levantamientos aislados, como el de Santana Rodriguez "Santanon" que asoló el centro y sur de Veracruz o el del Gral. Hilario C. Salas en la región de Acayucan, pero no solo Veracruz mostraba inconformidad, Morelos y Puebla, esos movimientos provocaron la migración de familias completas a otros lugares, y dentro de esos lugares se encontraba Atoyac y la región conocida como "Salsipuedes". A mediados de la década de 1890 en una próspera hacienda en el estado de Puebla cuyo propietario era un rico español, un día, llegó Pola, una joven muy bonita, a pedir trabajo, desde su llegada, el rico hacendado puso sus ojos en ella, una época donde los hacendados eran dueños de todo, incluso de la vida de sus empleados. Tanto fue del agrado del hacendado la joven Pola que algunos años después, tras fallecer su esposa, la lleva al altar y de ese matrimonio nacen 2 hijos, Alfonso y Amando. Los movimientos armados previos a la revolución mexicana empezaron con ataques a las haciendas alejadas de las grandes ciudades y tal fue el caso de la hacienda del esposo de Pola donde los alzados toman la hacienda, la saquean y muere el hacendado, ante esta situación, en medio del incendio y la refriega, Pola toma a sus hijos Alonso el mayor y el pequeño Amando de solo 7 años y huye, toma el ferrocarril y viaja sin rumbo fijo hacia Veracruz, tras pasar Córdoba y Paraje, Pola ve una gran construcción en un gran llano por lo que decide bajarse en la siguiente estación, Atoyac, se lee en un gran anuncio de fondo blanco y las letras negras, bajo los candentes rayos del sol, regresa por el camino pensando en encontrar un mejor porvenir para ella y sus hijos. Cuando Pola llega a la gran construcción busca al capataz y logra colocar a su hijo mayor en la construcción. Así es como a los 7 años de edad llega el pequeño Amando a este terruño. Cuando aquel 8 de enero de 1908 Ia National Sugar Refining Company inicia la primer zafra del Ingenio El Potrero Alfonso se coloca como obrero. Ese día nacieron a la par tres grandes gigantes en la vida de nuestra comunidad, el primero, un coloso que ha sido el centro neuronal y económico del pueblo, el segundo un gigante del sindicalismo local, regional y nacional y el tercero, un gigante en la vida política municipal y estatal. Preocupada por que el pequeño Amando estudiara y aprendiera a leer y a sumar, Pola platica con algunas de las esposas de los dirigentes del Ingenio que enseñaban el silabario entre los hijos del personal de confianza y los hijos de los trabajadores las cuales aceptan al pequeño, es así como como ingresa a estudiar el pequeño. Como un homenaje al valor de su madre por luchar por el porvenir de ellos, ambos hermanos toman la decisión de honrarla por toda la vida y determinan utilizar el apellido de Pola Vidals y sin menospreciar el apellido del padre solo utilizarán su inicial para complementar los dos apellidos, la historia los recuerda con cariño y afecto como Alfonso Vidals M. y Amando M. Vidals. En 1913 el joven Amando Vidals empieza a laborar en el Ingenio el Potrero comp eventual en diferentes puestos hasta alcanzar la planta y tener la categoría de Operador de Centrifugas y Estibador. En 1924 cuando inicia la lucha para formar el primer sindicato azucarero, los hermanos Vidals estaban ahí, puestos a defender y luchar por sus derechos y los de sus compañeros. . En el año 1933 don Amando decide contraer nupcias con la profesora María Cristina Hernández de Vidals con quien procrea dos hijas, Elba y Gloria Luz. Don Amando, independientemente de laborar en el Ingenio ocupar dos veces el cargo de secretario General gracias a su oratoria y elocuencia logra trabajar en el gobierno del estado. Dadas sus dotes de orador y hombre de bien y sobre todo conciliador y gran amigo, los gobernadores del estado lo enviaban a aquellos municipios donde había conflictos sociales e incluso electorales. Fue gracias a esos trabajos que en 1944, el gobernador Jorge Cerdan Lara lo envía como presidente del Consejo de administración Municipal de Misantla durante el bienio 1944-1946. Tras un conflicto postelectoral en el Municipio de Lerdo de Tejada, el Gobernador Marco Antonio Muñoz Tumball decide enviarlo como Presidente del Consejo de Administración Municipal para el periodo 1956-1958. Con el buen trabajo realizado en los municipios administrados por don Amando Vidals, y tras no llegar a un buen acuerdo en las elecciones del año 1958, el gobernador Antonio M. Quirasco lo designa Presidente del Consejo de Administración Municipal en el municipio de Atoyac para el trienio 1959-1961. Durante su trienio se dio cuenta que el palacio municipal se encontraba muy deteriorado buscó los recursos necesarios para construir un edificio nuevo, pero el ser la primera autoridad municipal no fue impedimento para que al lado de los albañiles también trabajará como obrero en la construcción del nuevo edificio sin cobrar un solo centavo, simplemente como un colaborador más. Preocupado porque muchos adultos del municipio no sabían leer y escribir busco los apoyos necesarios para construir una escuela para educación para adultos. Bajo el lema de "un niño que no comia bien no rendía en la escuela" y apoyado por los consejos de su esposa, la profesora Cristina Hernandez de Vidals, instituyo el programa de desayunos escolares en la Esc. Primaria Gral. Lazaro Cárdenas, fue apoyado por un grupo de señoras altruistas que se encargaban de hacer los desayunos y dar leche a todos los niños, desafortunadamente al dejar el puesto de Presidente Municipal se acabaron esos grandes proyectos. Dentro de su carrera política fue electo diputado Local por el distrito de Huatusco y jefe de la oficina de Hacienda del Estado ubicada en Paso del Macho, cargo que ocupó hasta el último dia de su vida. Fallece en el seno de su familia en año de 1965 Como la mayoría de hombres de bien que ha habido en nuestro municipio Don Amando M. Vidals, permanece vivo en los corazones de su hija, nietas, bisnietos y en la memoria de los hombres y mujeres que recuerdan con cariño y agradecimiento su paso como presidente de Atoyac, recordándolo como uno de los pocos hombres que sirvió con honradez a su municipio. Recopilador: Nazario Guadalupe Cebada Morales
