por Hugo Morales Alejo
Murió este domingo 9 de julio, a sus 89 años de edad, el mejor orador de la segunda mitad del siglo pasado, ex presidente del PRI, ex Senador, ex diputado federal, líder,junto a Cuauhtémoc Cárdenas, del Frente Democrático Nacional, al oponerse a una "corcholata" que el sistema había lanzado como precandidato del PRI, Carlos Salinas de Gortarí.
Porfirio le apostó todo a Cárdenas, quien, una vez enquistado en lo que luego fue el PRD, le tapó el paso a la candidatura presidencial.
Histórico fue el discurso dado en el Congreso de la Unión, el 1 de septiembre de 1997, siendo diputado federal Porfirio Muñoz Ledo ante el presidente Ernesto Zedillo, que fue a entregar su 3er informe de gobierno. Entonces, los diputados, por grupos camerales, se alternaban cada año para responder el informe presidencial.
Fue una deliciosa pieza magnífica de oratoria de 1,069 palabras, donde incluyó estas partes:
"Saber gobernar es también saber escuchar y saber rectificar. El ejercicio democrático del poder es, ciertamente, mandar obedeciendo. Lo que en última instancia significa el cambio democrático es la mutación del súbdito en ciudadano"
Al final, citó el Juramento que los Reyes de Aragón, de finales del siglo XII, para dirigirse a Zedillo: "Nosotros, que cada uno somos tanto como vos y todos juntos valemos más que vos''.
Los que veíamos el informe por televisión, aplaudíamos de pie en cada frase pronunciada con esos altibajos, con esa proyección de voz, esos matices y énfasis que solo Porfirio sabía hacer.
En un tiempo cierto político priísta, desde luego enviado por los hombres del poder, se dedicó a denostar a Muñoz Ledo en medios de comunicación, con declaraciones un día sí y otro también. Cuando la prensa preguntó a Porfirio qué opinaba de ese personaje, este, certero en sus palabras solo atinó a sonreír y decir, "ese señor... es un borrachín simpático", sepultando a ese personaje en la oscuridad política.
Los años, que no perdonan, se fueron acumulando en Porfirio, que en los últimos años hablaba sin fluidez, cansado cada vez más. Por eso las nuevas generaciones conocen poco de él. Pero si buscan en redes, podrán aprender mucho de lo grande que fue.