jueves, 2 de marzo de 2023

UN NUEVO TEMPLO CATÓLICO A LA VISTA.



*CRONICAS, RELATOS Y LEYENDAS DE ATOYAC, VER.*

2 de marzo de 2023.

*UN DIA COMO HOY.*

2 de marzo de 1986.

Desde la llegada de los conquistadores españoles trajeron consigo la religión católica, la cual fue adoptada en toda Nueva España, prevalece en la época colonial y será hasta que se publican las Leyes de Reforma México adopta la libertad de culto y queda así establecida en las Constituciones de 1854 y 1917.

La construcción del Ingenio El Potrero y la llegada de los primeros colonos al pueblo, trajo también la necesidad de recibir instrucción religiosa.

Los primeros habitantes de Potrero pertenecían a la parroquia de Amatlán de los Reyes y con la creación del municipio de Atoyac, quedaron bajo la jurisdicción de la parroquia de Atoyac.

No será hasta 1937 que el sacerdote Manuel Illescas, sacerdote de la parroquia de Atoyac, ve la necesidad de construir primeramente una iglesia en Potrero para lo cual recibió en donación una parte del patio de maniobras del taller de torno y soldadura de Ricardo Cortes y su hermano, quienes gustosos hicieron la donación.

En 1937 el padre Illescas inicia la construcción de una pequeña capilla, una capilla de madera con techo de hoja de palma con qlgunas imagenes, posteriormente el 1 de enero de 1939 es colocada la primera piedra de la iglesia de Cristo Rey.

Después de padre Manuel Illescas, llegó el padre Octavio Castañeda también cura de la parroquia de Atoyac, quien esculpió las primeras imágenes de algunos santos de la parroquia. El padre Gustavo García fue el tercer sacerdote, después el padre Jorge H. Vera, y después de él, el padre Carlos Hernández, en 1955 llegó el padre Cipriano Ruiz a partir de 1948, recibe la categoría de parroquia y ya cuenta con un sacerdote fijo.

Después toca al padre Nicolás Núñez Martínez ser el primer sacerdote fijo y en 1960 el padre Juan González Solís se hace cargo se la parroquia hasta 1981 que llega el padre Francisco Juárez Montiel, conocido cariñosamente como el Padre “Panchito” quien se da cuenta que el pueblo ha crecido y la pequeña parroquia de Cristo Rey construida en los años 40s se ha vuelto insuficiente para albergar a la feligresía católica en las fiestas patronales, Semana Santa y otras festividades propias del catolicismo.

La llegada del Padre “Panchito” ha venido a fortalecer el catolicismo, y se da cuenta de las necesidades de tener un templo más grande para albergar y alimentar la fe católica, pronto, como parte de la homilía empieza a comentarlo, y empieza a trabajar en el proyecto.

Una rifa de un automóvil es el primer evento para reunir los primeros fondos.

La visita pastoral de 1984 de Monseñor Sergio Obeso fue aprovechada para bendecir la primera piedra con la intención de empezar el proyecto lo más antes posible, desafortunadamente el tiempo pasa y no se puede consolidar el proyecto.

Mientras tanto, paralelamente, el trabajador jubilado del ingenio El Potrero, Don Clemente Zayas Mora presenta ante el sacerdote y el consejo parroquial un proyecto para la construcción del nuevo templo el cual es aceptado.

A principios del año 1986, el Comité pro-construcción del nuevo templo parroquial presidido por Don Sosímo Solano Peña, la Sra. María del Pilar Castañeda, secretaria y la Sra. María Antonia Tavares de Vélez, tesorera, giran las invitaciones para la anhelada colocación de la primera piedra, evento que se llevará a efecto el 2 de marzo de 1986, en el terreno donado por la sección 23 del STIASRM.

Por fin llega el esperado día, a las 12 horas del 2 de marzo de 1986, contando con la presencia del Sr. Jaime Quevedo Morales, Presidente Municipal de Atoyac, el Sr. José Luis Ruiz San Martin, gerente del ingenio el Potrero, el Sr. Marcelino Ojeda, Secretario General de la Sección 23, Sr. José Ruiz Villagómez, expresidente municipal, los miembros del Comité pro-construccion del nuevo templo parroquial y otras personalidades, el padre "Panchito" coloca simbólicamente la primera piedra del nuevo templo parroquial, el primer paso está dado, pasarán algunos años para que sea estrenado el nuevo templo, pero, ahí está la semilla sembrada.

Porque el nuevo templo parroquial es escencia de fortalecer la religión católica, su historia debe ser conocida por las nuevas generaciones.

Vaya un aplauso a todos los que participaron con su cooperación para cumplir ese sueño; y un gran reconocimiento a Don Clemente Zayas Mora, Sosímo Solano Peña, Sras. Irma Castañeda y Antonia Tavares por el empeño y dedicación en este proyecto.

Con información de la historia de los Judas del Sr. Joaquin Contreras Martinez y de la familia Zayas Dominguez.

Recopilador: Nazario Guadalupe Cebada Morales.

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